Cyclosa conica es una araña pequeña sin nombre común. Es un tejedor de esferas, y se reconoce fácilmente por la forma en que ata los cadáveres de insectos y otros desechos y los cuelga cerca del centro de su red. Se esconde en esta cadena de escombros, y su coloración natural hace que sea extremadamente difícil de ver hasta que se mueve. Una de sus defensas contra los depredadores es mezclarse con estos escombros y fingir la muerte cuando se les molesta. Estas arañas son pequeñas; las hembras varían de 5.3 mm a 7.5 mm, y los machos varían de 3.6 mm a 4 mm. Las telarañas de estas arañas se caracterizan por una franja vertical que recorre el centro. Esta franja, o stabilimentum, está compuesta de presas muertas y otros desechos y se utiliza como escondite para la araña. El material en el stabilimentum también puede servir como señuelo para engañar a los depredadores para que ataquen los escombros, lo que le da tiempo a la araña para escapar.